Las plagas de ratones tienden a ser estacionales, siendo el invierno y el otoño los peores, pero los problemas con los ratones pueden tener lugar todo el año. Hoy vamos a ver las 3 principales señales que indican que tienes ratones en tu casa o negocio.
Excrementos de ratón y olor a orina
Si sospechas que pueden haber ratones en tu casa, lo primero que debes buscar son los excrementos de estos roedores urbanos. Los excrementos pueden estar a la intemperie, pero también pueden estar escondidos debajo de los electrodomésticos, en zonas de almacenamiento de alimentos o cerca de fuentes de agua.
Los excrementos de los ratones son de un tamaño muy similar a los granos de arroz, pero con otro color, desde el negro, hasta el marrón, y si es muy viejo, puede verse gris. El tamaño de estos excrementos suele tener una longitud media de 5mm.
También es posible que tengas una plaga de ratas en casa si encuentras excrementos, éstos son similares a las defecaciones de los ratones, aunque mucho más grandes.
Los excrementos de ratón no huelen, pero los ratones pueden generar entre 50 y 75 excreciones al día en su casa.
Cuando encuentres excrementos de ratón, ten cuidado al manipularlos y usa guantes, ya que estos excrementos pueden transportar una gran variedad de bacterias y enfermedades dañinas. Además ten en cuenta que dependiendo de varios factores, barrerlos o aspirarlos también podría propagar las bacterias por la vivienda.
Además, los ratones también orinarán, y a diferencia de las cacas, la orina de los ratones huele muy mal. Los ratones orinarán en los mismos lugares donde encuentran los excrementos, tiene un fuerte olor a amoníaco y, normalmente, si huele a orina en la casa, suele haber más de un ratón a quien culpar.
Destrozos, a veces poco evidentes
Los ratones son conocidos por roer todo lo que encuentran a su paso. Estos pequeños mamíferos a menudo roen muebles de madera, tejidos e incluso cables de la luz. Esto puede llevar a problemas muy peligrosos ya que los cables deshilachados pueden ser una causa importante de incendios, por lo que es muy importante deshacerse de los ratones antes de que eso ocurra.
Los ratones también pueden roer estructuras o usar agujeros ya existentes en las paredes para llegar a lugares ocultos donde puedan construir sus nidos. Además de estas marcas y agujeros, puedes encontrar papel, cartón, ropa y materiales similares triturados, lo cual indica su presencia.
A los ratones y roedores en general les gusta construir sus nidos con estos materiales blandos, así que cuando encuentres estos restos en casa, podría suponer una clara señal de una plaga activa.
Ruidos misteriosos
Escuchar golpecillos que emiten las actividades de ratones es otra indicio a tener en cuenta.
Los ratones son muy asustadizos y tienden a esconderse cuando hay humanos cerca, pero a menudo los oirás antes de verlos. Como a los ratones les gusta esconderse, es posible que oigas estos ruidos más frecuentemente durante la noche, cuando además hay más silencio en tu hogar.
Como medidas de prevención, recomendamos sellar los puntos de acceso a la vivienda, vigilar las fuentes de alimento y tener controladas las fugas de agua, por pequeñas que sean, tales como grifos que gotean.
Sin embargo, una vez que una plaga de ratones se ha establecido, puede ser muy difícil deshacerse de ellos por cuenta propia. Los ratones se reproducen increíblemente rápido y uno o dos ratones pueden convertirse rápidamente en docenas.