Con la ola de frío que está cayendo, uno pensaría que al menos tendríamos un descanso de una de las plagas más trabajadoras que existen, las hormigas, las cuales no se detienen ante condiciones climáticas adversas.
De hecho, las hormigas se imponen en tu casa porque hace mucho frío afuera. Así que ahora tenemos otro motivo del que culpar al invierno.
Lo creas o no, se puede sacar ventaja de la implacabilidad de las hormigas: son predecibles. Las hormigas que te molestan durante el invierno se comportan exactamente de la misma manera que las hormigas que te molestan en cualquier otro momento. Y lo que es más importante, puedes detenerlas de la misma forma.
¿Por qué veo hormigas en invierno?
Las hormigas pequeñas, de color rojo-marrón (en ocasiones negro) tiene la costumbre de anidar en grietas o huecos en el pavimento o dentro de las paredes. En la mayoría de las circunstancias, se repliegan y se vuelven estacionarias en invierno (descansan), y a la vez se mantienen a una temperatura de supervivencia. Sin embargo, si logran encontrar un lugar cálido, pueden permanecer activas todo el año. Uno de los sitios de acceso de estas hormigas es por debajo del suelo de plaqueta, alrededor de las tuberías y debajo de los zócalos.
Las hormigas necesitan las mismas cosas que todos nosotros: comida, agua y refugio. Si tienes una plaga de hormigas activa en tu casa en esta época del año, ya tienen su refugio. A las hormigas les gustan los alimentos ricos en proteínas y grasientos como la carne, el queso, incluso el pienso para mascotas. Si se les da la oportunidad, infestarán los productos alimenticios. También se sienten atraídas por los alimentos azucarados, así que ten cuidado con los preparativos de las fiestas.
Las hormigas no necesitan mucha agua. Un poco de humedad, como la cantidad producida por una fuga en la tubería o por la condensación, les vendrá bien. Si encuentras hormigas en armarios, cerca de los zócalos o incluso en el sótano, verifica si hay fugas de agua cerca. Las corrientes de aire cerca de puertas y ventanas pueden producir condensación que las hormigas también pueden aprovechar. Las hormigas no se reproducen durante el invierno, por lo que es un buen momento para aplicar un tratamiento antihormigas.
Nadie quiere comer alimentos que hayan sido infestados por hormigas, aunque no transmitan enfermedades, las heces de las hormigas pueden contaminar fácilmente los alimentos almacenados. Deshacerse de los alimentos infestados de hormigas es un contratiempo que puede resultar bastante caro.
¿Cómo evitarlas?
La mayoría de las hormigas en invierno entran en casa a través de pequeñas grietas y huecos en las esquinas, por tuberias de desagüe, o por alrededor de ventanas y puertas. Sella cualquier punto de acceso que encuentres con masilla. Luego, busca fugas en las tuberías y otras fuentes de humedad. Las hormigas necesitan agua para sobrevivir, así que si las privas de ella, tendrán que irse a otra parte.
Por último, pero no por ello menos importante, la obvia: mantener la cocina y las superficies limpias. No dejes comida en las encimeras, o en los platos apilados en el fregadero. Mantén los alimentos en la despensa almacenados en recipientes herméticos de plástico duro.
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